La Última Cena de Marithé François Girbaud

Este cartel ha sido retirado de las calles de Paris y Milan, a mi me gusta, no veo nada objetivamente ofensivo -salvo el hecho de que sea publicitario y pretenda venderte algo, pantalones vaqueros creo, lo cual siempre conlleva cierta agresión velada dirigida a la voluntad del que lo observa- Pero parece ser que a algunos sectores de creyentes (pocos, poderosos y cobardes: los de siempre) les ofende casi todo. Cualquier cosa que no se ajuste a su estrecha visión del mundo les ofende, a lo mejor habría que retirarlos a ellos de las calles y no estos carteles… pero no caigamos en la tentación de prohibir, prohibir es muy feo… pero puestos a prohibir, prohibamos a estos capullos 😉

No ofende el que quiere, señores, sino el que puede… ¿Tanta insegurirad les produce este cartel?

Pues como a mi me gusta, yo lo pongo aqui.