Recientemente una amiga mía me llamó la atención sobre una web que había visto en un blog que suele visitar. Era una web sobre un artilugio sexual: el BodyBouncer. El BodyBouncer puede describirse como una pequeña cama elástica con un agujero practicado en su centro. El video promocional que aparece en la web, así como la web en si misma no tiene desperdicio 🙂. El video me permito ponerlo aqui:
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Este artilugio es curioso, casi anecdótico, yo no me veo utilizándolo la verdad, porque tal y cómo se presenta en el video disminuye el contacto corporal prácticamente al contacto genital (y principalmente porque me sentiría ridículo dando botecitos en eso 😛). Pero este artilugio me trae a la memoria el informe durex: «[..]el 29% haber usado máscaras, ataduras, u otros estimulantes similares. El 15% haber usado vibradores alguna vez[…]».
Y es que hay en el mercado una gran cantidad de artilugios sexuales, juguetes con los que realmente el que se aburra en su relación sexual es porque quiere. Los más conocidos son los vibradores, pero hay una amplia gama. A mi me gustaría resaltar la utilidad de este aparato, el vibrador, en el juego de pareja (ocasional o no). Los hay de cualquier tamaño, forma, color, para realizar penetraciones o para estimular la parte externa, dobles, simples, con estimulación clitoriana, anales, vaginales. Ponga un vibrador en su vida sexual, no se arrepentirá. Como poco unas risas se echa 🙂.
Pero hay otros juguetes menos conocidos: las bolas chinas por ejemplo. Y no me refiero a ese par de bolas metálicas o lacadas que se agitan en la mano para aliviar el estres. A las que me refiero son muy parecidas, pero están unidas por un hilo. Para introducirlas en el orificio corporal que prefiramos. Los hay de muchos materiales: latex, metal, etc. También vaginales y anales, aunque las anales son distintas, parecen collares de cuentas. Permítanme proponerles un juego: Compren unas bolas chinas, de las de latex por ejemplo, las huecas con bolitas dentro, y antes de salir a cenar o de marcha, etc. introduzcan éstas en la vagina de su pareja (o la una a la otra si son dos chicas, la versión homosexual masculina de este juego es incómoda) con un poco de jugueteo previo y adecuada lubricación. Y salgan con normalidad. Ya me contarán como acaba la noche. 😉 Hay incluso un modelo que tiene incorporado un vibrador, que se activa mediante un control remoto sin cables… y si se atreve deje que su pareja «tenga el control» de la activación 🙂 (Las parejas formadas por dos mujeres son las que más disfrutarán con este aparato, realmente puede ser una noche muy divertida 🙂).
Aparte de estos juguetes hay muchos más: aparatos masturbadores para hombres y mujeres, anos y vaginas de latex, sillas y balancines dignos de un teletienda, látigos que no hieren, disfrazes de todo tipo, correas de velcro, cadenas, latex líquido que se solidifica al contacto con la piel y el aire, ropa interior comestible, condones de mil clases… echen un vistazo a cualquier sex shop online.
Atrévanse a jugar con esta enorme gama de posibilidades. A ver si en el próximo informe durex aumentamos este porcentaje tan cutrecillo que tenemos en España.
Un comentario
jajaja, como ya te dije muy bueno lo del bodybouncer, solo una cosa. espero k los españoles aumentemos el porcentaje de uso de artiluios sexuales pero k no sea a costa del bodybouncer jajaja entonces me da algo, entre otras cosas por la pasta k se pueden gastar,,,,saludos